Las inyecciones con rellenos dérmicos son uno de los procedimientos antienvejecimiento más habituales. Aunque pueden producirse complicaciones incluso cuando son manos experimentadas las que trabajan, es un deber del médico estético identificar y gestionar estas posibles complicaciones.

La creciente popularidad de los procedimientos de lifting de los tejidos blandos ha llevado a un aumento igualmente proporcional del número de complicaciones. En este post de nuestro blog intentaremos ayudar a los médicos y profesionales del sector estético y dermatológico a identificar las complicaciones lo antes posible y a gestionarlas adecuadamente para mejorar los resultados y la satisfacción de sus pacientes.

Cualquier tratamiento de relleno dérmico pueden dar lugar a alguna de las siguientes complicaciones:

  1. Relacionadas con el producto: productos no certificados (CE), productos permanentes no restaurables, naturaleza antigénica del material;
  2. Relacionadas con el médico: falta de conocimiento, experiencia insuficiente, técnicas de aumento/inyección no perfectamente estériles y asépticas;
  3. Relacionados con el paciente: alteración del mecanismo de defensas del huésped/paciente.

Es importante tener en cuenta todas las consideraciones anteriores para evitar o minimizar las complicaciones.


Complicaciones relacionadas con el producto

Un producto inyectable puede ser:

  1. No permanente y biodegradable
  2. Semipermanente y biodegradable
  3. Permanente y reversible
  4. Permanente y no reversible

Los rellenos se clasifican en función de la reacción histológica como voluminizadores con poca respuesta celular o bien estimuladores con fuerte reacción celular. El conocimiento de estas propiedades de la sustancia de relleno puede servir de guía para predecir una posible inflamación posterior o la formación de granulomas.

Complications in the aesthetic practice


Complicaciones derivadas del médico

La importancia del historial del paciente

El historial (anamnesis) es importante para evitar complicaciones, ya que ayuda a valorar la salud física y mental del paciente, la ingesta o no de medicamentos, los antecedentes de cirugías o tratamientos de rellenos previos en la misma zona a tratar, así como las indicaciones y contraindicaciones de los procedimientos en cada caso concreto.

Conocimiento de la anatomía y anatomía topográfica

Un conocimiento profundo de la anatomía de la piel, de otros tejidos adyacentes a esta (músculos , ligamentos, nervios…), de la función de estos tejidos, de los huesos, de las suturas y de la vasculatura en la zona de tratamiento es crucial para:

  1. La correcta colocación del material de relleno y la técnica de colocación adecuada para evitar los bultos, protuberancias o el efecto Tyndall;
  2. Evitar la colocación inadvertida en un vaso, que podría provocar isquemia, necrosis, ceguera y otros accidentes vasculares similares.Knowledge of Anatomy and Topographic Anatomy in aesthetic medicine

La inyección en el plano correcto es importante para obtener los mejores resultados. Es importante conocer las diferencias de grosor de la piel en las distintas partes de la cara (ver Figure 2). El grosor de la dermis facial varía entre 0,4 mm en los párpados y 1,2 mm en la frente y las mejillas. Por ejemplo, el diámetro exterior de la aguja 26G puede utilizarse como un indicador aproximado para guiar la profundidad de la inyección, ya que mide 0,45 mm, que es la mitad del grosor de la dermis, o a la inversa, la dermis facial sólo tiene el doble de grosor que la aguja 26G. Por lo tanto, para una inyección intradérmica adecuada, la aguja debe insertarse en un ángulo de aproximadamente 10° y usando un diámetro de aguja más profundo. Para la inyección en la dermis media para tratar pliegues de moderados a profundos, la aguja debe insertarse en un ángulo de 30° – 40°, y para la inyección en la dermis profunda o en la región supraperióstica para tratar pliegues más profundos, la aguja debe dirigirse en un ángulo de 45° – 90°.

Vasculatura y problemas isquémicos

El deterioro vascular puede producirse por inyecciones inadvertidas en determinados vasos o como resultado de la compresión externa debida a la presión del material inyectado.

Las zonas de alto riesgo que pueden conducir a ceguera son:

  • Nariz;
  • Pliegues nasolabiales;
  • Frente;
  • Glabela.

Las zonas propensas a la necrosis son:

  • Glabela;
  • Punta de la nariz;
  • Labios.

Importancia de la técnica de inyección

Los rellenos dérmicos pueden inyectarse utilizando una aguja o una cánula, según la experiencia y la comodidad del médico, ya que ambas tienen sus propias ventajas e inconvenientes. En general, los rellenos deben ser inyectados lentamente después de la succión, y la entrega de material debe ser en pequeños volúmenes por pasada y con la menor cantidad de presión posible.

El uso de agujas de pequeño calibre ralentiza la velocidad de inyección, y el uso de cánulas romas en regiones de alto riesgo, como la glabela, la nariz y la zona nasolabial, reduce el riesgo de lesión de los vasos.

Lo más importante para una práctica segura es un lugar de trabajo estéril y una asepsia estricta durante la técnica para evitar infecciones.


En la segunda parte de este blog, hablaremos de las complicaciones tempranas con más detalle y compartiré algunos consejos profesionales sobre cómo evitarlas. ¡Permanece atento!

Comprensión de los rellenos de ácido hialurónico en la medicina estética: rellenos de AH monofásicos y bifásicos.